Termina un largo e increíble sábado en Austin en uno de los más importantes festivales musicales de Estados Unidos y quizás del mundo, el Austin City Limits Festival.
Agotados de los dos primeros días de festival, pero sabiendo que nos queda todavía una fecha (quizás la mejor de los tres días) decidimos irnos a descansar para ese último empuje.
En ese punto llevábamos 2 largos días bajo un calor intenso y muchos kilómetros caminados en todas las direcciones para no perderte el setlist de tus artistas favoritos.
Hasta ese momento habíamos tenido la dicha de ver a Arctic Monkeys, Queens of the Stone Age, Wilco, Silversun Pickups, The Cure y otros tantos que ya no recuerdo.
9 am – Lamentable Noticia
Nos levantamos listos para lo que sin duda seria un día que todos (un grupo de amigos panameños) y nuestro guía, un brother local a quien denominamos como el Human Landmark (ya que con su presencia rápidamente podías encontrar a tu grupo entre la multitud).
Para nuestra sorpresa esa mañana, las intensas lluvias de la madrugada inundaron el Zilker Park y el último día fue cancelado por los organizadores por temas de seguridad.
Después de un largo rato de duelo e incertidumbre (y recuperación), decidimos irnos a un bar de la localidad en Rainey Street para ahogar nuestras penas con cerveza.
Rainey Street es un área donde seguramente habría mucho movimiento de todos los asistentes al Festival (más de 75,000).
12 pm – Algo de esperanza
La lamentable noticia de la cancelación del festival tenía al grupo muy desanimado, sin embargo, nuestro host (The Human Landmark), quien vivió tantos años en esta vibrante ciudad, estaba convencido de que en Austin con una escena musical tan activa y reconocida, habiendo tantos venues y gente sedienta de música algunas bandas seguramente tocarían.
Después de la resignación pero convencidos por nuestro amigo las posibilidades de ver algún concierto subieron el ánimo del grupo. En ese momento decidimos empezar a monitorear las redes sociales para estar pendientes los rumores que seguramente movilizarían a las cientas de miles de personas que se esperaban ese día de ACL, en varias direcciones de la ciudad.
Era vital la rápidez con la que actuáramos. Enseguida empezaron los rumores y al leer una publicación, que parecía bastante creíble, decidimos movilizarnos al Moody Theatre.
El Moody Theatre (un teatro construido 2 años antes y state of the art) diseñado como un estudio de grabación de televisión y un espacio de interpretación de música en vivo y uno de los íconos de la música en Austin.
2:00 pm – ¿Llegamos a tiempo?
Llegamos al teatro y ya en ese momento habían cerca de 200 personas en fila. Inmediatamente nos metimos en la cola y en cuestión de minutos la fila ya la daba la vuelta a la cuadra.
Había mucha incertidumbre respecto a quién daría el concierto ya que nadie del staff confirmaba los rumores. Después de un rato, salió una encargada del teatro y dijo “There IS gonna be a concert here, I cannot tell you who it is. We are finishing a private event and as soon as we´re done cleaning we will get the concert started. We will let you know more as soon as possible.”
Las lluvias que habían logrado cancelar el festival seguían, un poco más intermitentes pero incesantes.
Pasaban las horas y seguíamos esperando noticias, de quién realmente se presentaría. Habían rumores de Franz Ferdinand, Phoenix, Tame Impala, pero nada concreto.
Para suerte nuestra, alado de donde estábamos en fila había un bar, por lo que nos rotamos en grupos de 2 ó 3 para cuidar el puesto en la fila e ir a buscar refugio y un par de pintas.
6:00 pm – ¡Anuncio importante!
Un poco cansados ya de la lluvia y el calor, aparecen varias personas del staff del teatro y proceden a pegar en las paredes hojas impresas con la información. La noticia más esperada llego, ¿a quién tendríamos la suerte ver?
¡Atoms for Peace! Los rumores eran ciertos, íbamos a ver al headliner del último día, a la famosa banda liderada por Thom Yorke de Radiohead y Flea de Red Hot Chili Peppers. La noticia subió los ánimos, después de varias horas de espera y cansancio acumulado.
7 pm Entrada al Teatro
Poco a poco se empezó a movilizar la fila para entrar al teatro, habían pasado ya cerca de 5 horas de larga espera y finalmente íbamos a entrar.
Al momento de entrar quedamos inmediatamente impactados por el teatro, empezábamos a caer en cuenta que de algo especial íbamos a vivir. Eramos unas 2,700 almas afortunadas que estaban a punto de presenciar una verdadera obra de arte.
Para ser sincero, poco había escuchado de la banda hasta ese momento, pero sabía que teniendo músicos de esa clase, iba a ser uno de esos momentos que nunca olvidaría.
9pm – Una experiencia inolvidable
Después de ubicarnos dentro del área general tan solo unos cuantos metros frente al escenario, tomarnos unas bebidas refrescantes, realizar las idas respectivas a los baños y ya estábamos listos para el espectáculo tan esperado.
Lo que sucedió en las próximas casi dos horas es casi indescriptible. La banda realizó una descarga musical llena de tanta energía y ellos (Thom Yorke en especial), sabiendo todo lo que habíamos pasado los asistentes para llegar a verlos lo dieron todo en el escenario y la conexión con el público era como pocas veces lo he vivido.
Al terminar el concierto, recuerdo las caras de la gente alrededor, era como que nadie sabía exactamente lo que acababa de pasar. De nuestro grupo fueron las pocas palabras que se dijeron hasta horas después.
Si hay algo que disfruto más que cualquier otra cosa es experimentar un concierto o un festival. Cada uno de los recuerdos desde mi primero (Soda Stereo en el Freeway en 1996) hasta mi último (Radiohead en Bogotá) son experiencias únicas que siempre llevaré en mi memoria.
Sin duda, que aunque han pasado cerca de 5 años desde ese día caluroso y lluvioso de octubre, recuerdo cada detalle como si fuese ayer y estoy seguro que todos los que estuvieron ese día también.
Afortunadamente vivimos en la era de Youtube y sino me crees, te invito a ver el concierto completo aquí: